La Revolución Cultural China
Por Vir Covi
Primer Artículo sobre la revolución Cultural Grado 9°
El 1 de octubre de 1949 el máximo dirigente del Partido
Comunista Chino, Mao Zedong (o Tse-Tung) proclamó la República Popular China.
Durante su gobierno, entre 1949 a 1976, caracterizado por intensas campañas
ideológicas, se arrogó el planteamiento del marxismo-leninismo pero con matices
basados en las peculiaridades de la sociedad china, muy distinta de la europea,
otorgando un papel central al campesinado, en lugar del proletariado El Gran
Salto Adelante consistió en una serie de medidas adoptadas durante la década de
1950 para aprovechar el enorme caudal humano y aumentar la producción agrícola
e industrializar el país sin importar maquinaria, sino mediante el trabajo en
masa y la creación de 1 millón de hornos de alta fundición de acero. Estas
medidas, cuyas víctimas fueron principalmente los campesinos, fueron un fracaso
pues la hambruna debida a las malas cosechas y a las catástrofes naturales
provocaron la muerte de más de 10 millones de personas. Además el acero resultante
fue inservible ya que era una mezcla de diferentes materiales.
Este
descalabro forzó la salida de Mao de Pekín, pero una vez en Shangai no se
resignó a perder el poder pues veía la evolución de China como una traición a
las ideas revolucionarias por lo que desde allí comenzó a hacer un llamamiento
a la resistencia frente a la burguesía preparando así el retorno. En 1865 los
Diarios ya hablaban de Gran Revolución Cultural, cuyas víctimas eran los
intelectuales y dirigentes del país puesto que la enorme campaña ideológica
alentaba al ejército y a los jóvenes a condenar los actos revisionistas de las
ideas de Mao, creándose los Guardias Rojos (1966-1968), grupos de estudiantes y
jóvenes que representaban al hombre nuevo sin perjuicios burgueses, con luz
verde para utilizar las medidas que creyeran oportunas contra quien expresara
interés hacia cualquier cosa que no fuera la ideología de Mao, quien
comprendiendo que su devoción le sería útil, les encomendó atacar las ideas,
hábitos, pensamiento y cultura antiguas, pues representaban otra manera de
pensar y eran vestigios del feudalismo, con libertad para decidir qué era
antiguo, lo que tendría consecuencias nefastas para la cultura tradicional
china, pues destruyeron obras de arte y templos. Los Guardias publicaban
carteles, se manifestaban diariamente e incluso cerraron las universidades y
colegios para que los alumnos se unieran a las manifestaciones provocando que
una generación entera de jóvenes no tuviera ninguna educación que no fueran los
lemas revolucionarios. Este enorme lavado de cerebro, además de la fidelidad
ideológica de los soldados a Mao, la ayuda de su mujer Jiang Qing, Ministra de
Cultura, y la obra de su fiel Lin Biao, Ministro de Defensa, que recopiló un
libro con sus discursos más importantes, el Libro Rojo de Mao, instrumento de
adoctrinamiento de la población, consiguieron que algo imposible de imaginar
después del Gran Salto Adelante sucediera, y es que Mao volvió a tomar el poder
en Pekín.
Mientras, y como era de esperar, los Guardias Rojos
comenzaron a tener enfrentamientos entre ellos para ver quien demostraba más
lealtad a Mao, quien consciente de que amenazaban la existencia misma del
estado les ordenó cesar sus purgas y les dispersó por las provincias más
lejanas, con lo que acabaron extinguiéndose. Mao, para ratificarse en el poder,
convocó en 1969 al Partido Comunista, adoptándose el maoísmo como la ideología
oficial del partido y del estado. Este Congreso dio por terminada la Revolución
pero comenzaron los problemas con su fiel Lin
Biao. Mao, que había decidido
suprimir la jefatura de estado para que el pueblo le viera como un líder
preocupado por la ideología y el partido, no por intereses personales,
comprendió el porqué de tanta adulación de Biao, quien viendo que si la
presidencia se suprimía él dejaría de ser el sucesor, comenzó a preparar un
golpe de estado que fracasó, muriendo al parecer en un accidente de avión
cuando huía a Tailandia, aunque su muerte nunca quedó clara.
Como su desaparición dejaba un vacío de poder en el Partido
se convocó un nuevo Congreso en 1973 donde ascendieron en la jerarquía su mujer
Jiang Qing y sus colaboradores más cercanos. Cuando Mao murió en 1976, el
sucesor al que había designado pocos meses antes, consciente de que una lucha
por el poder era inevitable ordenó arrestarles como colaboradores de una Revolución
catastrófica para el país.
Desde su muerte el gobierno de la República Popular China ha
abandonado en la práctica el maoísmo aunque el pensamiento Mao sigue siendo la
ideología del estado. Hoy se permite cuestionar las acciones concretas de Mao pero
no la validez del maoísmo. Una vez evaluada aquella época se ha llegado a la
conclusión de que fue un verdadero desastre. Su fracaso sirvió para
desacreditar la idea del socialismo en la mente de muchos chinos, lo que abrió
el camino para el desarrollo del capitalismo aunque conservando el Estado su
función planificadora bajo la dirección del Partido Comunista. Entre las
reformas económicas y la circunstancia de que es la nación más favorecida en los tratados
comerciales con Estados Unidos, el caso es que hoy es la segunda economía mundial, en contraste con la
corrupción, injusticias y desigualdades que padece la sociedad china en la actualidad.
https://factoriahistorica.wordpress.com/2011/03/06/la-revolucion-cultural-china%E2%80%8F/
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