martes, septiembre 26, 2017

Bill Evans

 Sunday at the Village Vanguard








  Bill  Evans

 Nació en Plainfield,  Nueva Jérsey,  un 16 de agosto de 1929. Ya a los 6 años comenzó sus estudios en música. Fue entrenado en el estilo clásico del piano; de pequeño también estudió flauta y violín. Se graduó con un título de intérprete de piano y maestro en el College Southeastern Lousiana (ahora Universidad) en 1950, y estudió composición en el College de Música de Mannes en Nueva York. Luego de servir en la armada, trabajó en bandas de danza locales, y con el clarinetista Tony Sott, la cantante Lucy Reed y el guitarrista Mundell Lowe, quien llevó al joven pianista frente al productor de Riverside Records, Orrin Keepnews. El primer disco de Evans fue lanzado en 1956 y se tituló "Nuevas Concepciones del Jazz". Este disco fue la primera grabación de su más amada composición “Vals para Debby”.

Su siguiente disco “Everybody digs Bill Evans” no fue grabado sino luego de dos años; el siempre tímido y autodespreciante pianista afirmaba que “no tenía nada nuevo que decir”. Gradualmente se volvió conocido en la escena jazzística de la ciudad de Nueva York, por sus originales sonidos en el piano y sus fluidas ideas, hasta que, en 1958, Miles Davis le propuso unirse a su grupo (del cual también participaban John Coltrane y Cannonball Adderley).

Permaneció con ellos por casi un año, viajando y grabando, y subsecuentemente tocando el clásico álbum “Kind of Blue”-mientras componía “Blue in Green”-, ahora un muy conocido tema del jazz. Su trabajo con Miles le ayudó a afianzar su reputación y en 1959 Bill fundó su trío más innovador con el ahora legendario bajista Scout LaFaro y con Paul Motian en batería. El concepto del trío de igual interacción entre los músicos fue implementado virtualmente por Evans, y dichos trabajos discográficos permanecen como los más populares de su gran repertorio. Juntos hicieron dos álbums de estudio, además de las famosas sesiones en vivo en el Village Vanguard de Nueva York, en el año 1961.

La trágica muerte de LaFaro en un accidente automovilístico unas pocas semanas después del contrato con Vanguard-un evento que devastó a Bill- colocó al pianista en un aislamiento temporal, luego del cual regresó al formato del trío en 1962, nuevamente con Motian y Chuck Israels en bajo.

El álbum "Conversaciones con mí mismo" (1963), en el cual duplica y triplica sus canciones de piano, ganó el primero de los muchos premios Grammy, y al año siguiente hizo un tour al extranjero, tocando de París a Tokio, el cual le afianzó una reputación mundial. El gran bajista Eddie Gomez comenzó un provechoso puesto, que llegó a ocupar durante once años, con Bill en 1966, en varios tríos con bateristas como Marty Morell, Philly Joe Jones, Jack DeJohnette y otros-participando en algunas de las presentaciones y álbumes (que se dieron en los clubes más aclamados) de la carrera de Evans.

Su producción grabada fue considerable -para Riverside, Verve, Columbia, Fantasy y Warner Bros- con los años también hizo sesiones (especialmente en sus comienzos) con algunos de los hombres más grandes del jazz. Músicos como Charles Mingus, Art Farmer, Stan Gets, Oliver Nelson, Jim Hall, George Rusell, Séller Manne, Toots Theielmans, Kai Winding, J.J. Jonson, Hal McKusick y otros.

En los setenta, grabó extensivamente, primero un trío y un solo de piano de vez en cuando, pero también varios álbumes de quinteto bajo su propio nombre, al igual que dos memorables fechas con el cantante Tony Bennett. Su último trío fue formado en 1978, compuesto por el incomparablemente sensible y delicado Marc Jonson en el bajo y el baterista Joe LaBarbera, el cual rejuveneció al debilitado pianista, quien estaba eufórico con su nuevo grupo, llamándolo “el más cercanamente relacionado” en relación a su primer trío (con LeFaro y Motian).

Aún continuaban sus problemas familiares y los trastornos en su vida personal, (generalmente debido a ataques de la adicción a los narcóticos), pero a pesar de ello aún llevaba una dinámica vitalidad musical, una gran confianza, una energía fresca, e incluso una interacción más agresiva con el repertorio del trío. La salud de Evans se fue deteriorando; sin embargo, él insistió en seguir trabajando hasta que finalmente tuvo que cancelar un compromiso en el Fat Tuesday de Nueva York. Finalmente fue llevado al Hospital Mount Sinai el 15 de septiembre de 1980, donde falleció de una úlcera sangrante, cirrosis de hígado y neumonía. Fue sepultado cerca de su amado hermano Harry, en Baton Rouge, Louisiana.

Mientras Evans abrió un nuevo camino a los nuevos acercamientos musicales que no comprometieron su visión musical y artística-tales como su ocasional uso del piano eléctrico, y sus breves asociaciones con el compositor de avanzada George Russell- él siempre insistió en la pureza de la estructura de las canciones y en la noble historia de la tradición del jazz.

Consistentemente fiel a sus propios criterios pianísticos, él continuó realzando su singular visión de la música hasta el final. En su corta vida, Bill Evans fue un artista prolífico y profundamente creativo y un hombre genuinamente compasivo y gentil, a menudo frente a sus recurrentes problemas de salud y su naturaleza inquieta.

Su rico legado permanece completamente vigente y sus composiciones han disfrutado ser redescubiertas por los intérpretes de jazz e incluso por algunos músicos clásicos. Incluso veinticinco años después de su paso, la música de Bill Evans continúa influenciando a músicos y compositores en todo el mundo y a todos aquellos quienes han sido profundamente tocados por su genio expresivo y por su arte sensible.


http://www.pianored.com/bill-evans.html





No hay comentarios:

Publicar un comentario